La terapia de las flores de Bach es una terapia global ya que tratan al individuo y no la enfermedad ni sus sintomas. A la hora de utilizar las flores de Bach no solo se tiene en cuenta la salud de la persona, sino también, su estado de ánimo, su personalidad y su modo de enfrentarse a los problemas. Ahí radica una de las claves de las flores de Bach.
Las Flores de Bach son una serie de 38 esencias naturales utilizadas para tratar diversas situaciones emocionales: miedos, soledad, desesperación, estrés, depresión, traumas, fobias, ansiedad, obsesiones, tristeza, falta de confianza, inseguridad, insomnio, déficit atencional, problemas de aprendizaje…
Mediante la armonización de los estados negativos, las flores de Bach ayudan a reestablecer el equilibrio emocional perdido, haciéndonos conscientes del origen del desequilibrio.
“La salud depende de estar en armonía con nuestras almas”
Edwar Bach.